Realizan corto con mensaje sobre la muerte

Por Mariana Dávila

Hiram Villarreal, estudiante de Comunicación Social en la Nueva Universidad Regiomontana dirige el cortometraje “En la droguería”, como proyecto final de la cátedra de Técnicas de cine.

Durante el séptimo tetramestre de su carrera, este joven ya ha participado en la producción de otros cortos, sin embargo, afirma que el que dirige actualmente es el más complicado e importante de la materia.

La idea que inspiró la elaboración del cortometraje es original del autor español Leopoldo Alas “Clarín”.  En el cuento que lleva el mismo nombre que el documental, Alas refleja los temas de la muerte y la posición socioeconómica al relatar la historia de Benito, quien intenta conseguir las medicinas para atender a su enferma madre con las limitaciones económicas de su realidad.

Bajo la premisa de que “no necesariamente quienes tienen acceso a las medicinas se curan”, como Villarreal afirma, el joven director tiene en claro el objetivo que quiere alcanzar con su cortometraje.

Para la realización del corto fue necesaria la adaptación del texto original a guion de cine, misma que hizo Hiram Villarreal buscando transmitir el mensaje de que “a todos en algún momento nos toca y tenemos que aprender a lidiar con el tema de la muerte”.

Sin un presupuesto fijo, la actual etapa del proyecto consiste en la búsqueda y selección de locaciones y la definición de los artículos de utilería que se necesitarán durante el rodaje.

Además, la convocatoria para la selección de los actores que darán vida a los personajes de “En la Droguería” arrancó el día de hoy, viernes 27 de marzo. El casting tendrá lugar en el estudio de televisión de la Universidad Regiomontana, el próximo lunes 30 de marzo por la tarde.

El casting para los actores será el próximo lunes 30 de marzo,

Junto a su asistente de dirección, Astrid Peña y a su productor Javier Muñoz, maestro de la materia, se tomará la decisión del elenco para esta producción.

El cortometraje estará listo para finales de abril y se subirá a la red mediante el sitio Youtube.

Ve la entrevista completa aquí:

El Laboratorio de la U-Erre

Por Estefanía Páez

El crecimiento de la Nueva U-Erre ha traído grandes cambios y nuevas oportunidades. El Laboratorio de Activación es sin duda uno de ellos. 

A solo seis meses de su apertura, el gimnasio de la institución no ha recibido quejas de ningún tipo. Por el contrario, los alumnos de la universidad han tomado este nuevo beneficio con gusto y constancia. 

Eso asegura Victor Escamilla, uno de los entrenadores del Laboratorio de Activación. Para él, el nuevo espacio ha sido aceptado con brazos abiertos y los objetivos planteados en un principio se han cumplido como era esperado. 

Escamilla explica que lo más importante para los visionarios responsables del gimnasio, era la seguridad del usuario. Es por eso, que en Octubre del 2014 se abrieron sus puertas para los atletas de los equipos representativos de la U-Erre. 

Gracias a que lo anterior funcionó, ahora todo alumno inscrito en la Universidad Regiomontana (ya sea en nivel superior, maestría, o bachillerato) puede gozar de las instalaciones. Al registrarse, los alumnos reciben trato personalizado, un plan de entrenamiento que se ajuste a sus necesidades y posibilidades físicas, los entrenadores le dan seguimiento y orientan al usuario a un mejor desempeño con el paso del tiempo.

Los únicos requisitos son: acudir al tercer piso del edificio de Rayón, no tener adeudos en tesorería, y registrarse en el primer ingreso. 

Entre los pocos obstáculos que han  enfrentado, Escamilla menciona que el equipo es básico. Sin embargo, no han recibido quejas o inconformidades en lo absoluto. 

El acceso al Laboratorio de Activación es totalmente gratis y sus instalaciones ofrecen completa seguridad a todo usuario. Se encuentra en el noveno piso del edificio de Rayón y cuenta con una hermosa vista del centro de la ciudad.

 

Cambios drásticos

Por Susana García

Las oportunidades se presentan y es raro no aceptarlas y seguir con tu vida. Lulú Zamora platica cómo los cambios llegaron a su vida el día que decidió salir a conocer el mundo.

Lulú es una estudiante de Comunicación Social en la Universidad Regiomontana. Además de ir a la escuela, está unida a un grupo de la iglesia católica que cada verano tiene misiones en diferentes partes del mundo.

La primera vez que le invitaron a un evento fue en el verano del 2013 y éste tuvo lugar en República Dominicana, lo cual le emocionó y decidió dejar un tetra por primera vez.

Se metió a trabajar mientras sus amigos estudiaban y fue cuando se dio cuenta de la magnitud de lo que estaba haciendo.

Con lo que no contaba fue que al regresar iba a encontrar a sus compañeros en un ambiente social diferente. “Dije: 'va a estar todo igual.' Y no. Entonces sí fue un shock para mí”, comentó Lulú.  

Le causó un poco de conflicto el regresar y ver que sus compañeros, que siempre estaban unidos, se separaran tanto en cuestión de tan pocos meses.

El segundo viaje que se le presentó, también del grupo de la iglesia, fue a Acapulco y éste le tomó más tiempo decidir si quería irse.

“Nos íbamos un mes antes, entonces implicaba también dejar tetra.”, dijo Lulú, pero aceptó ya sabiendo que le esperarían más cambios drásticos al volver a casa.

Esta vez el cambio fue diferente. Se encontró con que la Universidad en sí había cambiado. “No entendía nada. Ese fue como que el shock.”, dijo Lulú mientas reía.

Desde la primera vez que se fue dijo que ya no dejaría otro tetra porque no le gustó el hecho de que se quedaba atrás con las materias y sus papás le decían también que ya no dejará la escuela.

Este verano, el grupo de la iglesia tiene un viaje a Costa Rica con la diferencia de que será solamente una semana. Lulú decidió asistir porque ir a misiones es algo que le gusta mucho, además de conocer otros lugares, otras personas y tener nuevas experiencias.

Ella dice que ya no habrá más viajes largos porque quiere terminar la carrera y quiere empezar con sus prácticas profesionales, pero nunca se sabe qué otras oportunidades se presentarán en la vida y cuáles aceptarás siendo algo que haces con placer.

Ve aquí la entrevista completa:

Alcanzar el futuro

Por Astrid Peña

Buscar trabajo, viajar por el extranjero o seguir estudiando son los principales planteamientos que se hacen los alumnos al estar a punto de terminar su carrera universitaria ¿Cómo encontrar el camino correcto en una etapa tan decisiva?

Es por esto que la UERRE en su constante esfuerzo porque sus egresados obtengan mayores posibilidades al recibirse, organiza dos veces al año una Feria del Empleo en la cual los alumnos y ex alumnos tienen la oportunidad de conocer una amplia variedad de vacantes que se adapten a su perfil.

En convenio con las principales empresas de la ciudad y el país, entre ellas: Metalsa, Banorte, Cinépolis, etc., el evento fue organizado el pasado 25 de marzo en las instalaciones del edificio CEDAE dentro de la universidad.

A esta Feria acudieron 25 empresas expositoras con las cuales los alumnos podían acercarse a hablar, comentar dudas y entender el giro de la empresa, además de conocer opciones para prácticas en el extranjero o trabajo de niñeras para alumnas recién egresadas.

Los tetramestres en los que se realizan estas ferias son los de otoño y primavera. En promedio tienen una asistencia de mil a mil 200 alumnos y ex alumnos de los que, según cifras dadas por Lizzie Martínez, organizadora del evento, el 50% de los asistentes logra concretar una entrevista ahí mismo y un 20% queda en base de datos y recibe propuestas laborales en los siguientes seis meses, cumpliendo con esto el objetivo del evento.

La Feria se realiza de 11 de la mañana a 7 de la noche, esto con la intención que los alumnos de todos los turnos puedan asistir y conocer opciones de trabajo o prácticas.

Este tipo de eventos ayudan a los alumnos en la búsqueda de trabajo y al mismo tiempo brinda a los alumnos la seguridad de que su universidad los respalda y apoya para tener una mejor elección al terminar sus estudios profesionales.

La Boutique U-ERRE

Por Susana García

Qué mejor sentido de pertenencia hacia tu escuela que utilizando algo con su nombre entre tus cosas.

La Universidad Regiomontana abrió las puertas de la “Boutique U-ERRE” hace casi un año con el propósito de que sus estudiantes portaran algo con el nombre de su escuela. Desde plumas hasta conjuntos de chamarras se venden cada semana.

Ernesto Orozco, vendedor en la Boutique me dijo que las ventas varían desde $30 a $900 pesos.

“La gente piensa que la Boutique no vende pero no saben que hay un promedio de personas a la semana que entra y compra algo”, informó Ernesto.

Lunes, martes y viernes entra un promedio de 35 personas de las cuales sacan algunas ventas y miércoles y jueves entran 70. La mayoría con algún objeto.

Se han hecho convenios con proveedores cono Adidas, Swiss y próximamente Nike. Ernesto hace muchas llamadas y va a juntas con tales para cerrar tratos y ver qué es lo que le conviene más a la Universidad.

Un proyecto que se ha llevado a cabo esto mes de marzo es el de la Boutique Móvil, que se encuentra en el edificio del CEDAE. Es llevada a eventos y conferencias para que personas de fuera también conozcan los productos y se lleven algún recuerdo. “Hay maestros que encargan regalos y se les hace algo único”, dice Ernesto.

El presupuesto de la Boutique es de un millón de pesos y se tiene que saber dividir ese dinero respetando las reglas y políticas acerca de crear un producto con proveedores, cosa que a Ernesto se le da ya que estudia ciencias políticas por las tardes. 

“No crean que me la paso sentado aquí todo el día. Hay veces que ando de aquí para allá haciendo llamadas y viendo gente”, comentó Ernesto.

Trabajar en la Boutique también es para aquellos estudiantes de la universidad que quieren cumplir con su servicio becario y deben cumplir con algunas horas a la semana para que se les valga.

La Boutique es un proyecto que trabaja más de lo que los estudiantes piensan. Y aunque algunos de ellos lo nieguen, si llegan a comprar objetos para sentir esa pertenencia y orgullo de estudiar en esta Universidad.

Entendiendo a Monterrey

Por: Astrid Peña

Montañas por todo alrededor, edificios, un clima indeciso y gente acostumbrada a vivir a prisa todo el tiempo.

Son los principales factores que convencieron a  Jorge Jacinto Sánchez Lara para decidir estudiar durante un semestre en la ciudad de Monterrey N.L. México.

Originario de la ciudad de Ensenada  Baja California, Jacinto, estudia en el Centro de Enseñanzas Técnica Superior. Debido a un enamoramiento fugaz con una regiomontana es que decide estudiar por un tiempo en esta ciudad.

Y es así como después de una serie de trámites y juntar toda la papelería requerida, el pasado mes de enero Jacinto supo que vendría a nuestra ciudad para estudiar  su sexto semestre en la Licenciatura de Diseño Gráfico.

“Al principio sentí miedo y felicidad, miedo porque no sabía cómo iba a sobrevivir sin mi mamá”, confiesa Jacinto con una sonrisa tímida. A pesar de esto le fue fácil adaptarse y también entender el sistema de trabajo de la UERRE ya que él nunca ha estudiado por tetramestres.

El plan original era estudiar en la Universidad de Monterrey (UDEM) pero por su promedio de 8.4 le asignaron su segunda opción la cual era la UERRE en donde se siente muy cómodo y ha podido conocer las principales atracciones turísticas del centro de la ciudad.

 Aunque en pasadas ocasiones ya había visitado la ciudad pero solo como turista, no conocía mucho sobre el transporte público y las distancias que tendría que recorrer para llegar a cualquier lugar.

“Me gusta mucho Monterrey y el acento de la gente, pero no estoy acostumbrado a que todo esté lejos”, menciona Jacinto al recordar todo el tiempo que invierte para llegar a la universidad diariamente.

A pesar de esto, Jacinto menciona que le gustaría vivir en Monterrey después de graduarse, encontrar un buen trabajo  y poder formar una familia y una nueva vida aquí.

Para finalizar,Jacinto comenta que a un mes de regresar a su ciudad de origen se siente muy feliz con su experiencia en la ciudad de Monterrey y muy agradecido con las personas que le permitieron sentirse como en casa. 

 

La U-ERRE impulsando talentos

por Estefanía Paez

La Universidad Regiomontana constantemente impulsa a sus estudiantes a que crezcan en el ámbito que les apasiona, los apoya y los hace sentirse orgullosos de su alma mater. 

Tal es el caso de Guillermo Jiménez, un jóven de 23 años que estudia para ser Licenciado en Comunicación Social en la U-ERRE. La escuela le ha ayudado a conquistar nuevos terrenos en el teatro, pues gracias a ella ha conocido figuras que paso a paso lo han llevado a lo que hoy es: El coreógrafo de la comedia musical "Francesco" de Kefás Producciones. 

Ser parte del equipo creativo de una puesta de este tamaño, es una responsabilidad imponente.  Guillermo asegura que empezar desde abajo le dio la seguridad de aceptar la carga profesional que su trabajo actual implica. 

Nacido el 29 de Diciembre de 1991, el hijo más pequeño de Juan Jiménez y Adriana Olmos sabía lo que quería hacer con su vida desde muy temprana edad. 

El fallecimento de su madre en la adolescencia de Jiménez, lo hizo seguir su vocación artística con mayor deseo debido a que ella fue quien lo familiarizó con la apreciación a las artes. 

Es por su devoción a cumplir con lo anterior que en el 2010 recibió una beca de teatro en la Universidad Regiomontana. 

A partir de entonces, avanzó a pasos agigantados gracias a las diversas oportunidades escénicas y a las eminencias artísticas que han cruzado su camino: como la primera actriz Guadalupe Treviño, a quien admira profundanente; la veterana Delia Garda, un personaje clave en su desarrollo como actor; el director de talla nacional Alejandro Orive, ganador del premio a mejor dirección por su reciente puesta "La Fierecilla Tomada"; Oscar Carapia, coreógrafo de grandes puestas en escena en el Distrito Federal; Dolores Martínez Rangel, entre otros. 

Actualemente, a la par de sus estudios, Guillermo Jiménez se encuentra en el Auditorio San Pedro tras bambalinas en Francesco El Musical, al lado de figuras como el compositor José Antonio "Potro" Farías. Prepara obras cortas de Hernán Galindo "Galidramas", bajo la direcciónde Guadalupe Treviño, y está por graduarse en el mes de Agosto. 

A futuro, Jiménez planea irse al Distrito Federal a la escuela de teatro musical Artestudio y dice saber que esto es solo el principio. 

Difusión Cultural: pieza importante de la visión caleidoscópica

Dentro de la visión caleidoscópica de la Nueva Universidad Regiomontana, la administración ofrece espacios para que los alumnos se desarrollen bajo el modelo de formación integral en diversos ámbitos.

Uno de los espacios que permite la participación de los alumnos fuera del área académica y la interacción con estudiantes de distintas carreras es el Departamento de Difusión Cultural, ubicado en la esquina de Matamoros y Juan Aldama, junto al edificio de Aulas 1.

“Difusión es un espacio para que los alumnos se reúnan para aprender y hacer lo que más les apasiona”, afirma Fitzgerald Navarro, coordinador del área de producción del Departamento. La Universidad reúne a cerca de 20 docentes especialistas en su área para impartir a los alumnos interesados talleres relacionados con la música, las artes plásticas y las artes escénicas.

Cerca de 100 estudiantes se inscriben cada tetramestre a los talleres que Difusión Cultural les ofrece. “El catálogo es amplio, tenemos desde lectura en voz alta, cómics y pintura hasta canto, batería, danza aérea, jazz, hip-hop, ballet clásico, salsa, flamenco y hawaiano”, menciona Navarro. Los alumnos se inscriben la primera semana de clases, pagan la cuota correspondiente, asisten a clases y al final del ciclo tienen una presentación para ponerse a prueba y exponer los conocimientos aprendidos.

Existen también grupos representativos con actividades de alto rendimiento para los alumnos más comprometidos, quienes forman parte de los proyectos al ser aprobados por los maestros que realizan las audiciones. Para estos eventos se reúnen las disciplinas de música, canto y danza coordinados por directores de talla nacional.

“La participación en Difusión Cultural les da a los alumnos herramientas más allá de los conocimientos académicos: aprenden a trabajar en equipo, a resolver problemas, a relacionarse con sus compañeros y a aprender de manera autodidacta”, afirma Navarro.

Para mayor información de los talleres se puede visitar el sitio oficial http://www.u-erre.mx/vida-estudiantil/difusion-cultural  o marcar al teléfono 8220 4850.

La puesta en escena "Ligero de Equipaje" es la más reciente producción de Difusión Cultural, puedes verla en el siguiente video: